BLA BLA

martes, 27 de enero de 2009

Nenuco & Pepona *








Duermo en una caja pequeña de mediano tamaño, y de color azul, mi nariz topa con el plástico transparente, donde me reflejo para que las personas puedan observarme; unos me miran con ternura, otros me quieren abrir, a veces suelo caerme y reboto, y los tirantes que afirman mis pies y manos hacen que sienta un ligero dolor. Una ridiculez lo encuentro, soy un juguete como otro, pero mala suerte tengo, ponen a mis demás hermanos en vitrina y a mi me dejan solo en una repisa. ¿Por qué? Me llamo Nenuco como los otros, estoy en la misma caja, tengo los mismos ojos con pintura creados, me aprietas la pansita y digo “mamá”, entonces ¿Por qué me dejan acá?.
No comprendía porque me apartaban, mis hermanos me miraban y con sus miradas inmóviles decían que una falencia me hallaban, me dio un poco de susto, quería cerrar los ojos y no podía, quería taparme el rostro, daño me haría.

El local de nuestro dueño, lleno permanecía, mucha gente se llevaba a mis hermanos y cada vez mas solo me sentía, las horas pasaban y nadie sabía de mi existencia, necesitaba llorar, pero me lo prohibían, ya que la pintura de mis ojos se podría correr. Aguanté un rato y vi que una pequeña muchacha se señaló, con su madre muy entusiasmada se acercó y me tomó le dijo “” mami, ¿por qué no me lo compras?””, No le dijo su madre,”” este muñeco no tiene corazón””. Al escuchar con mis pequeñas orejas lo que la madre le dijo a su pequeña hija, gran decepción se me vino encima, mi caja de a poco se desvanecía, me di cuenta que algo grande me faltaba, pero… ¿Por qué un corazón?, soy un juguete sin emoción, no puedo moverme, solo pensar, es la gente que me hace actuar.

Ya era tarde y el almacén cerró, al ver que mis hermanos se fueron con los humanos, ahora estaba cómodo en este rincón, sentía un enorme vacío en mi cuerpo inerte, “” mejor tirarme al piso de cerámica y acabar de una vez”, eso pensé. Antes de terminar con mi existencia mi caja entera moví, era obvio que todo estaba oscuro, pero de de repente una luz amarilla percibí. Muy paralizado quedé, pero no me importó, y decidí tirarme de una buena vez. Cuando poniendo mi caja de lado estaba, esta luz amarilla se acercaba, de la nada se puso frente a mi plástico transparente, y me dice “”Nenuco no lo hagas, por favor detente””.Exaltado me sentí, enderecé mi cajita y sin pensamiento quedé, ya que no era la una luz la que me hablaba, el amarillo color que me iluminaba, se trataba que de una muñeca Pepona que más y más se me acercaba.
Un poco nervioso me dejó ya que ella provocó gran cosa con su carita linda de algodón. ¿Qué será?, no lo adivinaba, pero de la nada algo en mi pecho como un Tic – Tac sonaba. La muñeca Pepona tomó el cordón de su espalda, me di cuenta que con eso se comunicaba, me decía suplicándome que no me tirara, yo no era el único juguete que solo me hallaba, muy callado permanecí, pero sentí tal curiosidad y le pregunté ¿Por qué estás tan solita aquí?, Con su mirada melancólica me dice “” mis bracitos los tengo descocidos, y mi cordón no cumple con su objetivo””, la miré y a la vez me percaté que algo húmedo mojaba mi cara me miré en mi plástico trasparente y por fin lloraba!!.Luego miré con tristeza a Pepona y yo seguía llorando, le pregunté ¿Cuál objetivo es ese?, “” entregar amor””, me dijo desamparada. No aguanté más y tiré que lo que sostenía mis extremidades, dolor sentí, pero al fin y al cabo mi cajita pude abrir. Me acerqué a Pepona y la abracé, y ambos nos dimos cuenta que éramos los más solos del almacén, besé sus brazos descocidos, tiré de su cordón y no escuche ni un pequeño sonido, preocupado me sentí, pero al tenerla entre mis brazos, su voz sin ejercicio alguno pude recibir, me queda mirando y yo a ella también, nos dijimos te amo mutuamente, y una nube rosada nos separó, soplé y soplé y pude desvanecer la nube al mirarnos con Pepona, sentimos emoción, ya que esa mágica nube rosada en humanos nos convirtió. Rompimos la repisa pero no nos importó, así que salimos corriendo del viejo almacén y proclamamos nuestro amor.

1 comentario:

~ Neutra dijo...

o.o*


La historia de dos muñequitos mi amor, qué más va a pasar por tu mentecita? Soy la luz amarilla que evito que cometieras un suicidio xd sería la Pepona más felíz del mundo si te tuviera ahora junto a mí. Adoro cada cuento que inventas porque sé que es para mí, me gustaría devolverte todas las cosas que haces por esta tonta... Pienso tanto en tí pequeña MIA, pienso en estar contigo, abrazarte, besarte. La amistad que tenía hacia tí ya se me escapó de las manos y del corazón, no sé en que se está transformando ahora, pero te aseguro que en algo mas hermoso.

T E A M O! Amor mío.